Ayer domingo fue la última función de las siete programadas en el Teatro Nacional Cervantes de este gran espectáculo. Actores y bailarines se han destacado en una puesta en escena muy sólida y atractiva para el espectador a cargo de Silvia Vladimivsky y un acorde diseño de luces, escenografía y vestuario. Carlo Argento ha logrado componer un Quijote-Cervantes insuperable e Iván Espeche una acertada composición de Gardel, sorteando la dificultad de la inevitable comparación que hace el espectador con la imagen por todos conocida del ídolo.
Conociendo el esfuerzo que deben realizar los técnicos y artistas para llevar a buen puerto esta clase de puestas en escena, sería esperable que nuestro Teatro Nacional Cervantes contara con la organización y los fondos suficientes para realizar un mayor número de funciones, no sólo 7, y de esa manera brindar mayores posibilidades a los espectadores y a un espectáculo que por su calidad se lo merece.
Más información en "Azares del Quijote y Gardel"
No hay comentarios:
Publicar un comentario